Conversamos con Rodrigo Ortega: Panelista del 1° Congreso Técnico Científico del Avellano

El evento, organizado por AgriChile reunirá a expertos e investigadores para compartir los últimos avances en el cultivo del avellano europeo.

En esta nueva entrega del ciclo de entrevistas a los expositores que estarán en nuestro congreso a realizarse el próximo 19 de junio, conversamos con Rodrigo Ortega, Ingeniero Agrónomo Académico e investigador en el Departamento de Ingeniería Comercial de la Universidad Técnica Federico Santa María.

Con una destacada trayectoria académica y científica, el Dr. Ortega ha contribuido significativamente a investigaciones de Agricultura de Precisión.

¿Cuál es el principal aporte de su investigación o experiencia al desarrollo del cultivo del avellano europeo?

— La investigación aporta elementos clave, como las demandas de nutrientes para mejorar la implementación del manejo integrado de la nutrición (MIN) del avellano, que es considerado un elemento esencial dentro de la agricultura regenerativa. Además, entrega información clave para estimar la fijación de carbono en los cultivos de avellano y el aporte que este carbono hace al mejoramiento del suelo y sus servicios ecosistémicos. 

¿Qué desafíos enfrenta hoy la industria del avellano europeo en términos productivos, ambientales o tecnológicos?

— El avellano debe mejorar su eficiencia productiva, es decir producir más con menos, de manera de mejorar la rentabilidad del cultivo, reduciendo de paso su impacto ambiental. Para ello debe incorporar nuevas tecnologías dentro del concepto de agricultura regenerativa, incluyendo prácticas de MIN como las enmiendas de suelo (encalado, materia orgánica y otras), el ajuste de las dosis de nutrientes, el uso de inhibidores de nitrificación y bioestimulantes microbianos y no microbianos, entre otros, además de la agricultura de precisión.

¿Cómo visualiza el futuro de este cultivo en Chile y a nivel global?

— Como todos los cultivos, una sobreoferta de producto puede deteriorar los precios, sin embargo, por tratarse de un cultivo mecanizado y tecnificado, la sustentabilidad económica del avellano es mejor que muchos otros cultivos, ya que por esta vía puede mejorarse la eficiencia productiva, disminuyendo los costos unitarios de producción. 

En particular en Chile, el cultivo se desarrolla en un ambiente de alto potencial de rendimiento que puede expresarse vía mejoramiento del manejo agronómico, lo que le permite competir con éxito en el mercado mundial.

¿Por qué considera relevante la realización de un congreso científico como este para la comunidad agrícola y científica?

— El congreso es esencial para transferir el conocimiento desarrollado a partir de investigación pertinente, el que podrá ser incorporado por asesores y productores directamente en sus explotaciones, además de servir como base para que los investigadores puedan avanzar sus líneas de trabajo en el cultivo. Además, aporta al proceso formativo de los estudiantes a través de la producción de material técnico, universalmente disponible. 

¿Qué valor cree que tiene este espacio para los productores, investigadores y actores de la industria?

— Este espacio, de carácter universal y gratuito, tiene un alto valor para toda la industria, pues acerca de manera aplicada resultados de investigación desarrollados localmente. Además, sirve como un espacio de discusión amplio y diverso.

¿Cómo ve el aporte de AgriChile a la generación de conocimiento, al impulso de la innovación y al vínculo entre el mundo académico y el sector productivo?

— AgriChile ha sido un actor muy relevante en el desarrollo de conocimiento en el cultivo de avellano, vinculándose de manera efectiva con académicos, investigadores, asesores, productores y empresas proveedoras para generar un ecosistema de I+D. 

¿Considera importante abordar nuevas problemáticas técnicas en el manejo del avellano en Chile? ¿Cuáles?

— Las necesidades de I+D son permanentes, y a mi juicio, temáticas que aborden la adaptación del cultivo al cambio climático, el mejoramiento de la eficiencia productiva, la economía circular y el manejo sitio-específicos son algunos de los temas que deben abordarse.